Este jueves, un grupo de militantes de Morena procedentes de Nuevo León, Tabasco, Michoacán, Estado de México y San Luis Potosí, arribaron abruptamente a la sede de su partido, ubicada en la colonia Roma, en Ciudad de México, para tomar el lugar y exigir un encuentro con su líder nacional, Mario Delgado.
Los quejosos denunciaron imposiciones de los precandidatos a las gubernaturas, con el otorgamiento de candidaturas a personas externas al partido.
Fustigaron que se acordó una cita para este 28 de enero con Delgado, la cual había sido pospuesta desde el día 11; empero, el dirigente morenista brilló por su ausencia.